Y tú tientas al demonio encadenado en mi mente.
Y tú embriagas a las ganas arrastrándome al pecado.
Y tú mientras y tú siempre y tú hasta donde me llevas.
Y tú calientas mi sangre que está quemando mis venas.
Lujuriosos pensamientos tan carnales, tan obscenos,
que cualquiera haría juicios si nuestras mentes leyera…
Estas jugando con fuego y jugar con fuego quema.
Es caminar por cornisas es vivir una quimera.
Aunque confieso que a veces quiero soltar tentaciones.
Pervertirte dulcemente, liberar mis emociones.
Que mis abismos ocultos ya no te guarden secretos.
Que mi piel sea tu hoja en blanco donde me escribas tus versos.
Con el toque de tus manos hagas revivir las mías.
Coincidentes comulgantes, entrelazadas, ceñidas.
Que nuestros cuerpos desnudos se proyecten en las sombras.
Que se resbalen las sabanas y que me abarquen tus formas.
A media luz de las velas que te escurras por mi espalda.
Que mi pelo te acaricie y te haga perder la calma.
Que me retraten tus ojos parpadeando pinceladas.
En un éxtasis de besos, caricias y de miradas.
Tu mi Velázquez viviente, yo, tu Venus del espejo,
Impúdica, descubierta, con mi piel de porcelana
Que mi boca sea tu musa, que a ti mi poeta embriaga
Para pronunciar las rimas que Bécquer no imaginaba
Y apagarnos tenuemente cuando se duerman las llamas
De esta pasión encendida, entre versos, piel y alma…
Bellas y Eternas Lunas
†Selene Luna Aeterna†
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18/11/2011
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